Durante una fecundación in vitro con donación de óvulos, la paciente llevará al niño, pero el embrión que se le transfiere proviene de la fecundación de los gametos de una donante por los espermatozoides del esposo. Por lo tanto, el compañero masculino juega un papel crucial en la FIV con donación de óvulos. Si la receptora debe preparar su endometrio y la donante debe estimular sus ovarios, el esposo también debe seguir ciertas pautas para optimizar las posibilidades de éxito, aunque no se trata de un tratamiento médico propiamente dicho, comparable al de la receptora o la donante.
Tanto para la mujer como para el hombre, antes de cualquier tratamiento, es necesario realizar una serie de exámenes previos. Calidad, cantidad, debilidades… Los espermatozoides se estudian desde todos los ángulos para estimar la viabilidad de la FIV con donación de óvulos.
Así, a cada pareja masculina se le prescriben los siguientes exámenes:
Serología: El objetivo es verificar que el hombre no transmitirá enfermedades infecciosas a la madre o al niño. El VIH, las hepatitis B y C, y la sífilis son las principales infecciones examinadas. En caso de contaminación, es posible solicitar un lavado de esperma.
Espermograma: Forma, tamaño, movilidad, calidad, cantidad… Los espermatozoides son sometidos a un análisis exhaustivo para detectar posibles anomalías y decidir la técnica que se empleará para seleccionar los mejores espermatozoides para la inseminación.
Fibrosis quística: Si el esposo es portador sano, es crucial que la futura mamá no lo sea. La prueba se realiza mediante una simple extracción de sangre.
ALGUNOS EXÁMENES COMPLEMENTARIOS
¿La paciente sufre de abortos espontáneos recurrentes después de una FIV? ¿La fecundación no tiene lugar? ¿El esposo tiene antecedentes de salud relevantes? El especialista que sigue a la pareja en su proceso de FIV puede entonces prescribir otros exámenes, como:
Cariotipo: Detecta anomalías cromosómicas que juegan un papel clave en los problemas de fecundación.
FISH: La hibridación in situ fluorescente es una técnica recomendada especialmente en caso de fallos de implantación, abortos espontáneos consecutivos, oligospermia (bajo número de espermatozoides) o teratospermia (espermatozoides malformados). Es un cariotipo realizado sobre los espermatozoides.
Prueba de fragmentación del ADN: Los espermatozoides se someten a un examen detallado que puede llevar a un cambio de técnica en su selección si se detecta una alta fragmentación del ADN.
Dependiendo de cada situación, pueden recomendarse otros exámenes de manera natural.
Una FIV con donación de óvulos y esperma fresco implica que los óvulos de la donante deben ser extraídos y fecundados el mismo día. Por lo tanto, el esposo debe proporcionar una muestra de esperma en esa fecha exacta. Para que los espermatozoides sean de la mejor calidad posible, se deben seguir algunas recomendaciones:
Un espermatozoide tiene una vida útil de aproximadamente 3 meses: Comience a llevar una alimentación más saludable, deje el alcohol y el tabaco al menos tres meses antes del día de la extracción. Haga ejercicio y cuide su higiene de vida.
Práctique la abstinencia de 2 a 4 días antes de la recolección.
La recolección debe hacerse por masturbación: El coito interrumpido o la recolección mediante preservativo no son válidos.
Lávese las manos y use toallitas higiénicas en el momento de la recolección.
La toma de un antibiótico puede ser recomendada el día antes de la recolección para reducir el riesgo de infección del esperma. Sin embargo, esta decisión depende de la clínica y se refiere a antibióticos específicos. Si ha tenido fiebre o ha tomado antibióticos en los 7 días previos a la recolección, será necesario posponer la recolección de esperma.
La eficacia del esperma congelado está comprobada. Sin embargo, el proceso de descongelación provoca un aumento en la fragmentación del ADN. Por lo tanto, utilizar esperma fresco para una FIV-DO sigue siendo lo preferido, aunque no siempre es posible, ya que el esposo debe poder entregar su muestra el mismo día de la extracción de los óvulos de la donante.
Si el espermograma indica que los espermatozoides son normales y están presentes en cantidad adecuada, la congelación del esperma constituye una solución práctica y prudente, que evita el riesgo de quedarse sin esperma en caso de algún imprevisto el día de la extracción de los óvulos.
¿Tiene dudas? ¡Solicite a su clínica realizar una prueba de descongelación para observar las consecuencias del proceso sobre los espermatozoides!